Confieso que es la primera película que veo de Pedro Almodóvar. Y, a pesar de eso, he observado un sello muy personal e íntimo, difícil de explicar con palabras. Muy Almodóvar, podría decir aun habiendo visto una única película. Una marca que intuyo, y quizás me equivoque, se ha repetido y se repetirá en cada película, de una u otra forma y nunca de manera que el espectador pueda cansarse.
Todo sobre mi madre es también todo sobre mi amiga, mi hermana, mi tía, mi abuela. Todo esto es Manuela –a la que da vida Cecilia Roth-, madre de Esteban, un adolescente con una aspiración en la vida: ser escritor. En la noche de su cumpleaños, él y Manuela van a ver una obra de teatro protagonizada por Huma Rojo –Marisa Paredes-. A la salida de ésta, el joven se empeña en conseguir un autógrafo de la actriz, muriendo en el intento. Pero antes de morir, Esteban le hace saber a su madre que quiere conocer la verdadera historia de su padre, sin importarle quién y cómo es. Una historia que ha sido celosamente ocultada por Manuela pero que, al ver lo importante que es para su hijo, le promete contársela. Debido a los acontecimientos, su hijo nunca llega a conocer la verdad, pero ella siente que se lo debe, por lo que decide ir a Barcelona, en busca del padre de su Esteban.
Esta huida a Barcelona, como la califica la propia Manuela, va a ser una constante en su vida, que bien podría contarse desde los asientos de un tren que recorre un túnel oscuro, tenebroso pero que, como siempre, deja ver la luz al final. Una metáfora genial de lo que es la vida.
En Barcelona se reencuentra con Agrado –Antonia San Juan-, un travesti muy especial que le cuenta las últimas andanzas de Lola, el padre de Esteban. Juntas viven una serie de historias en las que lo importante, al final de todo, es la amistad. De esta forma conoce a la hermana Rosa –interpretada por Penélope Cruz-, una monja que está punto de partir hacia El Salvador y que esconde un increíble secreto, que hará que se convierta en alguien clave en el presente y futuro de Manuela. El personaje de Rosa es especialmente interesante por la mezcla de ternura y una pequeña dosis de frivolidad que hacen del personaje de Penélope Cruz alguien entrañable y dulce a pesar de todo.
Por avatares del destino y una dolorosa ironía, Manuela acaba formando parte del entorno de la actriz Huma Rojo, con la que llegará a compartir una bonita amistad. Porque, al fin y al cabo, esta historia trata del apoyo, de cómo una reunión de amigas puede ser balsámica. De cómo una desconocida puede convertirse en amiga, hermana y madre al mismo tiempo. De la confianza en la bondad de los desconocidos.
