Chico... si todo esto es cierto, que no lo creo, qué mal rato pasaste... seguro que para ella también fue doloroso. Las separaciones son complicadas, delicadas. Afortunadamente, el tiempo pasa y la mente sabe reubicar todo lo que hay que reubicar y esos sentimientos profudamente desesperantes desaparecen. Se sumen en las tinieblas del arco iris que recupera su vigor inicial. Y vuelven las lucen dicotequeras y es primavera de nuevo y para siempre... je je je... y colorin colorado este cuento NO se ha acabado!