Gracias. Almas perdidas en un turbulento océano, su suerte, desdichada, que golpean con puños, lágrimas o 38; la lucha por no tocar fondo, el fondo del abismo al que todos los días se asoman. Esa calle fácil, en la que todo vale para sobrevivir un día más; y aún así el amor resignado también está ahí.
Como bien dices, una nítida estampa del ambiente callejero de bajos fondos y tristes luces de neón en cualquier lugar.