A statue of Bertolt Brecht (Photo credit: Wikipedia)
Sentimos una admiración absoluta no sólo por las personas extraordinarias y fuera de lo común, sino también por aquellos que se atreven a decir cosas extraordinarias en unos tiempos dominados por el acomodamiento y la sumisión general del ciudadano de a pie. Y de esto no salvamos a los medios de comunicación, cuya crítica a los peces gordos de la sociedad brilla por su ausencia.
Es por ello que abrimos esta NUEVA SECCIÓN para subrayar todas aquellas intervenciones destacadas que digan lo que muchos saben pero no publican. Para aquellos que se mojan, que tanto necesitamos en estos tiempos. No nos valen opiniones a medias tintas, y solo incluiremos aquellas que realmente sean EXTRAORDINARIAS Y EXCEPCIONALES, IMPRESCINDIBLES Y NECESARIAS.
Hoy rescatamos un texto de Àlex Gorina publicado en "La Guía del Ocio - Edición Barcelona", en su sección "Àlex in Wonderland", hace ya muchos años, cuando el tiempo se paró en España.
Rogamos la máxima atención de nuestros lectores, pues el texto que viene a continuación no lo podréis leer ni oír con facilidad.
Se trata del extracto de una reflexión, más que acertada y por aquel entonces tildada de muy radikal para los tiempos que corrían, que el autor se decide a publicar bajo el título "Un film que predice", tras haber visto en el cine de la película "R.A.F. Facción del Ejército Rojo". Disfrutadlo, y a pensar un poco. QUE NO OS TOMEN EL PELO...:
"(...)La crisis económica es una, porque parece real, aunque resulta sospechosamente oportuna para reforzar desde el erario público las finanzas privadas y además tener a la población acojonada y sumisa. Es difícil imaginar que hoy en día, que el derecho a huelga falta poco para que sea calificado de acto terrorista y que para manifestarse no se debe pedir turno sino guardias de la circulación, la gente acostumbrada a un confort de egoísmo a ultranza vaya a reclamar sus derechos en serio.
Pero si la crisis sigue, y los políticos siguen insultándonos con su desprecio y paternalismo ya sin esconder los engaños que manejan, y el estado policial sigue incrementando su tendencia a volver a reprimirnos, y la corrupción continúa desvelando que el estado es una cueva de Alí Babá, y la educación sigue en salto mortal hacia la nada, y los pocos valores en los que aún confiábamos acaban revelando el pitorreo de la ética colectiva, pero sobre todo cuando se acabe la fiesta permanente en que habíamos convertido nuestras vidas, volveremos a los tiempos de los ejércitos rojos. Rojos, azules, verdes...no sé de qué color. Pero por ahí arriba, donde siguen políticos y financieros riéndose del común de los mortales, no van al cine. Yo les recomendaría ver el film de Uli Edel. (R.A.F.)"
ÀLEX GORINA, GUÍA DEL OCIO BCN, Versión escrita.
