A día de hoy sigue vigente este espectacular escrito. Después de 10 años seguís igual, la misma fuerza, la misma línea. Soís admirados por ello y vuestras palabras siempre nos han acompañado, sobretodo en los momentos de profunda soledad y de dudas existenciales y lo más importante, vuestras palabras nos han servido de guía en los instantes cruciales en los que uno duda hasta de sí mismo.
Pa lante, con fuerza, sin mirar atrás, siempre pa lante.
Gracias por estos 10 años de contenido cuyo valor es incalculable.